El miedo destruye nuestra casa, que se cae a pedazos por sobre mi, y me gritas al oído que lo detenga, pero yo no puedo detenerlo, estoy temblando y la casa conmigo, y vos conmigo, y te hundo y no quiero hundirte, porque no te voy a poder encontrar más abajo de los escombros. Ojalá, este miedo denuevo acá, no nos ahorque al dormir.
No hay comentarios:
Publicar un comentario