La importancia de lo que sucede es muy poca. Si hoy estamos tristes, es porque buscamos la felicidad. Todavía hay esperanza en nuestros pensamientos, no importa si todo se cae a pedazos, lo reconstruimos (versión 2.0) y seguimos caminando por la calle.
Hoy la mañana está fresquita, tengo puesta mi bufanda favorita. Pienso en comer chocolates. Pienso en ir a tomar submarinos con mis amigos. Pienso que prefiero quedarme en casa a pintar mas dibujitos.
Podría ser peor, podríamos creer que no va hacia ningún lugar. En cambio, nos mantenemos firmes caminando, cambiando, en lo posible, caminando hacia lo mejor. Por eso me compré una cajita de nerds de sandía, escuche Cocteau Twins y pense en lo lindas que son las nubes rebeldes en el cielo despejado.